mentir

Mentir no es más que posponer la duda,
pero es verdad al menos.
Todos sabemos qué es mentir y nadie
conoce la verdad: por eso afirmo
que ya no titubeo ni me embozo.
Yo quiero conocer.

Lo contradicho, Ciertas Mentiras. Chema Prieto

Abrió la puerta de la iglesia lentamente, pero no pudo evitar que pegara un pequeño portazo al cerrarse tras de sí. Llevaba 24 años haciendo lo mismo, un día tras otro, invariable e impertérritamente; era su obligación.

Llevaba tantos años diciendo las mismas tonterías, escuchando las mismas bobadas, vestido con el mugroso traje de mentira que se había fabricado él mismo y que le protegía de su yo verdadero, de su propia verdad...

Pero todo eso era pasado. No más mentiras, no más puertas cerradas, no más deseos insatisfechos, no más magreos impudorosos de sacristía, nunca más las palabras veladas y la hipocresía oficial. A la mierda. Sí...

Miró por última vez a su alrededor...las estatuas, las flores, las cruces, los bancos...puro espejismo. Gris, monotonía, asfixia...salió corriendo de allí...

Todo quedaba atrás, para siempre...en su mano, su carta de cese, arrugada...su carta de libertad.

Mirarse al espejo después de tantos años y no sentir vergüenza de su reflejo...nunca más mentir...cogió una estrecha calleja y se perdió por completo de vista.

En la plaza jugaban los niños vigilados por las abuelas...

escuchando: nobody knows the way I feel this morning, aretha franklin