creer
creíamos que íbamos a hacer algo grande,
especial.
deambulábamos de un antro a otro,
de un alma a otra,
mirando siempre alrededor, pocas
veces viendo nada.
creíamos que siempre seríamos
nosotros.
creíamos que nuestras moléculas andarían
volando en interespacios por siempre
jamás.
que nietzsche, kant, marx vendrían a
salvarnos de
la mediocridad,la asfixia, la cotidiana
ración de arcada,
las nebulosas flotantes de nuestra vida.
creímos ser fuertes
sobre los posos del vino,
bajo la lluvia de semen,
con los anillos del humo,
levitando en el sopor inherente
al pan nuestro de aquellos días.
ni nosotros, ni los fuertes, ni nadie,
ni nada.
la nada se hizo y
vimos que era bueno.
al séptimo día, descansamos para siempre.
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