buda, mi colega
tengo que limpiar el buda del escritorio,
que está lleno de mugre y polvo,
sobre todo por el pecho y la barriga; ah,
hemos pasado tantas noches juntos; hemos
soportado la trivialidad y el horror; en momentos turbios
nos hemos reído
limpiamente. ahora
lo menos que se merece es un buen
repaso
con un paño húmedo;
algunas noches, muy largas,
han sido verdaderamente terribles,pero
el buda ha sido una compañía agradable
y tranquila; no llega a mirarme nunca, pero
nunca deja de reírse. se ríe
de esta porquería de
vida: no hay nada que hacer.
"limpiarme ¿para qué?", me pregunta, "volveré a
ensuciarme".
"finjo compartir una necia cordura", le
contesto.
"bébete el vino", responde, "tú sirves para
eso".
"y", le pregunto: "¿para qué sirves
tú?"
replica: "para casi
mirarte".
luego se calla.
lleva una sarta de cuentas con una
borla.
¿cómo ha llegado hasta
aquí?
c. bukowski
4 comentarios:
Me alegro de volver a verte por aquí amigo,si es con Bukowski mejor que mejor; por cierto y sobre la iglesia, aunque como institución se les pueda culpar de mil desgracias, tampoco es cuestión de matar a esas pobres personas.Lo siento por sus seres allegados.
gracias por tus palabras amigo, una abrazo
Contigo.
Gracias por tus palabras amigo mio.
Ya veras que pronto nos veremos en otra puerta.
Saludos
Estuve unos días en Venarés, ciudad de la India donde Buda dió su primer discurso. En conmemoración de ese momento existen unos jardines increibles donde se puede ver a la gente meditando y dando una vuelta al momumento que construyeron hace siglos... De allí traje mi figura de Buda que ahora tengo en el escritorio, espero que sirva para no olvidar la sensación que tuve en aquellos momentos.
Un abrazo!!
Publicar un comentario