locura
es necesario llegar al fondo del alma humana, si es que existe, para contemplar el horror de la locura. pero no es menos triste observar la devastadora crueldad de los supuestos cuerdos. todos tenemos ese germen dual. la aparente cordura de diario y la íntima y oculta, hasta donde podemos, locura.
da miedo enfrentarse a esto. ya lo dice el refrán: los niños, los locos y los borrachos siempre dicen la verdad. quizás por eso tenemos tanta tendencia a mentir. porque no está bien visto ser como un niño, ni un borracho, ni mucho menos un loco. que tire la piedra quien no ha sido uno de ellos alguna vez o todos juntos. yo me retiro, por si acaso me dáis en la cabeza.
foto: dash snow
3 comentarios:
Me gustan esos tres estados. Ser "cabra chica", loca y emborracharme de vez en cuando.
Son los estados más ciertos y cercanos a sentirme viva y sentirme feliz.
besos
Sabias palabras... yo siempre tengo presente la frase Los locos que más miedo dan son aquellos que no saben que lo están. El componente de la locura o la enajenación en una persona es inherente a cualquier humano. Todos experimentamos ese estado, consciente o inconscientemente, en mayor o menor grado.
A mi siempre me han dicho que estoy loco por mantener con fiereza mis instintos infantiles. A veces me hacen sentir vergüenza, pero cuando crees en algo con tanta fe, lo cierto es que te da igual.
La locura, como todo, es algo más con lo que convivir, que aprender a controlar (siempre que podamos, a veces es tan dificil...), pero sobre todo, no negar que ella y nosotros somos compañeros inseparables.
Un abrazo.
Yo tengo dos de los tres estados, menos cuando me emborracho.
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