obediencia
sentado te esperaba,
tal como me habías dicho que
hiciera.
siempre he sido
un chico
obediente.
pasé largas horas
pensando en silencio,
observando las nubes,
oliendo los restos de tu
basura mental.
impávidamente pasaban los
días,
los minutos,
los jodidos segundos iban
cercenando mi escasa voluntad.
siempre he sido
un chico
obediente.
los posos del café
no se equivocaban:
tú no te habías ido,
realmente nunca estuviste
aquí.
mucho mejor,
así nunca he perdido
el
tiempo.
2 comentarios:
Nunca estuviste por cobarde,
nunca estuviste por contemplarte demasiado,
nunca estuviste por no dejarte la piel...
THE CURE EXISTE... SÍ... !EXISTE!!!!!
Hay veces que me gustaría pensar que tus últimas palabras son verdad...
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