diferente
cuantas veces nos creemos diferentes y en realidad lo somos.
solo que eso es la norma, ser diferente. sin embargo nos creemos únicos.
puede que así sea, pero la mayoría terminamos deseando las mismas cosas.
estamos desquiciados.
queremos ser únicos pero al mismo tiempo,
rechazamos a los que en apariencia no cumplen nuestros cánones.
nos sentimos especiales, pero despreciamos la singularidad de otros seres humanos.
nos da miedo lo diferente.
nuestro ego no soporta sentirse un segundón.
queremos ser el centro del universo.
lo más triste es que lo somos, sí.
pero no sabemos serlo.
no sabemos compartirlo,
no aportamos nuestra luz,
no sabemos nada.
deambulamos ansiando tener más,
aparentar más, ser más que nadie...
y así sólo somos la desgracia, la nada, la mentira, lo podrido y vacío.
a veces despertamos y
somos capaces de aprender algo.
quizá entonces haya esperanza
de que la eterna rueda
deje de rodar.
si te has caído,
levántate y vuelve a caminar.